martes, 24 de junio de 2008

Silencio

Te veo pasar por mi lado, y vuelve el silencio a reinar, oh! que hermosa eres, dulce hada de mediodia, a Dios te pido como presente, cada noche, y rezo sin creer, y hablo sin saber, que la solitaria luz que me guia hasta tu ojos, se silencia al sentir tu presencia. Esos cabellos tan rizados, como olas del mar, en los cuales me quiero perder y adorar, entre el mullido de tu cama virginal, desnudandote el cuerpo con mis manos, y el alma con mis versos. Desprender tu velo de mujer fatal, y añiñarme con tus senos, tan firmes y jovenes, donde encuentra como serenar, el salvaje gruñido del coyote mal herido, que siempre llevo en mi mirar. Y llegar al centro de tu cuerpo, y penetrar en tus pensamientos, sentirme dentro de ti, y besarte cada centimetro de tu dulce piel, quiero ser el unico hombre que se adentre en tu bosque de perversiones enmudecidas, y gritar en el acantilado de tu pasión, tu nombre junto al mi, pues las tornas ya se han dado, y empieza el nuevo camino, los bandos elegidos, la guerra del frenesí comienza con un beso.

Pero sigo sin confesarte mi amor, y solo soy el silencio convertido, en un hombre introvertido, que solo lográ hablar contigo, con dos copas de más. Pensarás que estoy loco, pero te necesito amar, pues estoy tan enamorado de ti, que no logro pensar ni dormir, estoy tan entregado a ti, que muero cada día y vuelvo a renacer, al verte con tu sensual caminar, acercandote a mi portal, mas el silencio..............vuelve, como siempre, mi alma, reinar

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